«Veo que hay una tendencia muy favorecida por las bases de la cultura dominante, que es una especie de romanticismo pop que exalta las cualidades típicas del estadio estético: la embriaguez, la autosatisfacción, la autenticidad, la sinceridad, la espontaneidad, aunque sea a costa de una gran vulgaridad. Y en cambio, no te induce a pasar al estadio ético, que necesita disciplina, orden, constancia».
Ignacio Gil (Nachter): «No estaría donde estoy si no es por las madres. ¡Son lo mejor!»
Una madre es madre y cuando cree que su hijo está haciendo algo que no es bueno para él, salen esas frases clásicas de «¿Vas abrigado?», «¿Has comido?», «¿Donde estás?», «Ni fiesta ni fiesto».