«El banco no te da una hipoteca para la reforma, así que no puedes acceder a una casa barata si no lo tienes ahorrado para poder hacer luego esa reforma», cuenta. Es decir, un mayor desembolso inicial y otro obstáculo para salvar la entrada que permitiría cambiar alquiler por hipoteca».
Sin hijos no hay futuro
España se desliza hacia el precipicio del vacío y deberíamos volver a prestigiar la maternidad. Nuestros descendientes son la vida misma y forman parte del destino que cada uno quiere protagonizar, aunque ellos necesitan alas para volar lejos del nido, como nosotros...