Tres de cada cinco jugadores que acaban pidiendo dinero prestado, ya sea a parientes y conocidos o a casas de préstamos, y ya sea para financiar su adicción o para tapar los rotos que con ella causan en la economía familiar, no pueden devolverlo como consecuencia de su propensión a las apuestas, según explica Jesús Cortés, investigador especializado en juegos de azar.
La demografía, excusa o realidad para la supresión de clases
Los datos los ofrece el sindicato UGT: el balance de unidades en la concertada arroja un resultado positivo de nueve en los centros de educación especial, segundo ciclo de Infantil y Primaria, si se relaciona el curso pasado y el actual. Frente a la misma realidad...