Entre las causas más frecuentes a las que los jóvenes atribuyen el retraso en el inicio de la paternidad y la disminución de la natalidad se encuentran las dificultades para conciliar trabajo y familia y la significativa precariedad laboral, en un momento en el que los precios de la vivienda así como los costos para criar y educar a los hijos son cada vez más elevados.
La crisis golpea de nuevo a los jóvenes
Se acaban de publicar los datos de la EPA del cuarto trimestre de 2012, tenemos 5,97 millones de desempleados. Hemos rozado los seis millones y la situación es gravísima. Desde el punto de vista económico tiene más sentido analizar la evolución del empleo, pues el...