La única cosa peor que tener mucha energía a las once de la noche, cuando deberías estar listo para irte a dormir, es estar completamente despierto a las tres de la mañana. La bendición de quedarte dormido a una hora decente no es mucho consuelo si tu cerebro se despierta demasiado pronto y se rehúsa a aprovechar esas ocho horas de sueño.
«Todo empezó en la cuarentena»: la anorexia que ha impulsado la pandemia
El Hospital Infantil Niño Jesús de Madrid no da abasto para atender la demanda de hospitalización de adolescentes con TCA. Aina y Victoria, que acuden a tratamiento ambulatorio en Son Espases (Palma de Mallorca), cuentan su experiencia y cómo es el camino de su...