Un equipo internacional de investigadores de las universidades de Western Sydney, Harvard, Kings College, Oxford y Manchester (Reino Unido) han evidenciado que Internet puede producir alteraciones agudas y sostenidas en áreas específicas de la cognición, que pueden reflejar cambios en el cerebro, afectando a las capacidades de atención, memoria e interacciones sociales.
Adolfo García-Sastre: «Es difícil que la viruela del mono ocasione una pandemia»
El prestigioso virólogo español, director del Instituto de Salud Global y Patógenos Emergentes de la Escuela Monte Sinai de Medicina de Nueva York, habla sobre el brote que afecta ya a más de una decena de países en todo el mundo donde la enfermedad no era...