«Nuestros niños están sobreprotegidos, sobreestimulados, sobrerregalados… Están infrautilizados y, por tanto, reconvertidos en inútiles, marionetas capaces de pocas cosas por sí mismos y eso les hace pasarlo muy mal en sistemas estructurados como la escuela. La escuela del futuro es la que cree en el que aprende, no en el que enseña».
El consuelo de la Quiet Ambition
"A partir de 2008, la relación entre sacrificio y expectativas se truncó. El sacrificio se hacía mayor en los sectores azotados por la recesión, y la recompensa, más improbable. Las empresas exigían más por mucho menos. Ser becario dejó de ser una gatera de entrada a...