No hay certezas en el amor. Pero, tal como explica Lidia Alvarado, psicóloga y life coach, estas parejas que se mantienen unidas con el paso de los años y que admiramos porque parecen perfectas no son fruto de la suerte o de la casualidad.
«Me he dado cuenta de que mi hijo Bosco, con síndrome de Down, es el mejor pegamento para la familia»
Las personas con discapacidad en general, son un ejemplo de fortaleza. Con mirarles te das cuenta de que va la vida. A lo que a mi me respecta, el síndrome de Down me ha ayudado a bajar a la tierra, poner los pies en ella, y aprender a vivir con sus zapatos.