José Viña puso hace unos meses a su madre, de 96 años, a subir todos los días seis pisos por la escalera, y asegura que su salud ha mejorado. “Cuando se va a entrenar me dice que no tiene ganas, para en el tercero a respirar, y le sube el pulso, pero los sube. Al principio le costaba más, pero ahora no sigue subiendo porque arriba solo tiene el terrado. Luego, eso sí, baja en ascensor, las caídas bajando son muy peligrosas”.
¿Hay vida pospandémica para quienes tenemos más de 80 años? Sí
A mi edad, la esperanza de vida es de solo seis años. Quiero pasar el tiempo que me queda viajando, asistiendo a fiestas con amigos y viendo a todos mis nietos que viven lejos. Estoy encantada de que mi comunidad de jubilados se haya reabierto.