En un país como el nuestro donde las jornadas laborales son de 8 horas es difícil conciliar la vida familiar con la laboral. Los progenitores se ven obligados a recurrir a otras actividades extraescolares que mantengan a los niños ocupados mientras finaliza la jornada laboral. Entre medias surge la necesidad de que los niños coman fuera de sus casas y el lugar más indicado es el colegio.
«La soledad puede llegar a ser tan perjudicial para la salud como el virus»
Miles de personas fallecieron durante la primera embestida sin poder sentir la cercanía de familiares en un intento de evitar la propagación del virus. Ésta es una de las conclusiones de la Jornada de Bioética 2020, una cita que de forma telemática organizó el pasado...