Por paradójico que parezca, los presos pasan más tiempo al aire libre que muchos niños de nuestras ciudades. Casi el doble. En concreto, el tiempo al aire libre en contacto con la naturaleza se ha reducido considerablemente, pasando más del 90% de su tiempo en espacios cerrados. El correcto desarrollo del niño necesita movimiento desde que nace y la forma más fácil e interesante de moverse, es jugando y si puede ser, al aire libre.
Javier Urra: Los niños tienen derecho a ser castigados
Javier Urra (Estella, Navarra, 1957) habla del infarto que sufrió hace una década con la serenidad característica de los psicólogos. Iba al volante de su coche y lo sintió llegar. Sabía lo que iba a pasarle. Desde entonces, lleva un ‘andamio’ en el...