Por paradójico que parezca, los presos pasan más tiempo al aire libre que muchos niños de nuestras ciudades. Casi el doble. En concreto, el tiempo al aire libre en contacto con la naturaleza se ha reducido considerablemente, pasando más del 90% de su tiempo en espacios cerrados. El correcto desarrollo del niño necesita movimiento desde que nace y la forma más fácil e interesante de moverse, es jugando y si puede ser, al aire libre.
Viaje a la ciudad construida sobre el milagro de la obsesión de EEUU con perder peso
Desde hace 50 años, el gigante farmacéutico Novo Nordisk fabrica en la planta de Kalundborg la mitad de insulina que se produce en el mundo, lo que ha dado una cierta prosperidad a la ciudad. Pero hace dos años, la farmacéutica danesa anunció la inversión de 60...