Cuando la persona no realiza una buena gestión de este proceso adaptativo, el cambio se experimenta de forma más intensa. Apareciendo así, síntomas de ansiedad, estrés, tristeza, apatía, falta de motivación, malestar, disminución del rendimiento, irritabilidad, insomnio, problemas de concentración, molestias gastrointestinales, tensión muscular, cansancio, dolor de cabeza, etc.
El consumo de marihuana en el embarazo podría ocasionar niños más ansiosos y agresivos
Las mujeres “suelen pensar que fumar y beber durante el embarazo debe evitarse a toda costa, pero no el cannabis”, comentó Yoko Nomura, neurocientífica en el área del comportamiento en Queens College, Universidad de la Ciudad de Nueva York, y coautora del nuevo...