Bienvenidos a la era de las mentes dispersas, de los cerebros a los que les cuesta centrar el foco, de las microconversaciones y la microatención, de personas que por momentos tienen la sensación de operar cual pollo sin cabeza en el ecosistema digital (cuando no, también, en la vida real).
Mis cinco trucos para la felicidad en el matrimonio
En 2010 asumí un compromiso anual con todos ustedes que el año pasado, por circunstancias que no vienen al caso, me fue imposible cumplir. Mis disculpas. Sepan que les voy a hablar de temas personales que poco tienen que ver con el contenido habitual de Valor Añadido....