No creo que la generación de mis padres pasara tanto tiempo arrepintiéndose y pusiera tanta energía en ello; si los padres necesitaban mudarse, entonces el niño se mudaba. No recuerdo que agonizaran pensando a qué escuela asistiría el niño y, desde luego, que molestaran a los hijos en la escuela era un hecho de la vida; ningún padre se sentía directamente responsable por las interacciones sociales de los niños pequeños. Además, los accidentes pasaban, las visitas a la sala de emergencias pasaban, las suturas pasaban, a veces una y otra vez al mismo niño.
«Los adolescentes tienen que entender que los padres no son sus amigos»
Según el estudio de Unicef 'Estado Mundial de la Infancia 2021', España es el país europeo con mayor prevalencia de trastornos mentales en niños y adolescentes de entre 10 y 19 años. El 'Barómetro Juvenil. Salud y Bienestar», de Fundación Mutua Madrileña y Fundación...