Hace 12 años. Eran las dos de la mañana y llevaba apenas unas horas estrenando, con sentimientos encontrados, esa maravilla que llamamos maternidad. Asombro, euforia, pero también culpabilidad, dolor y miedo. Nadie me había dicho que la lactancia iba a ser un calvario. Mientras luchaba en la penumbra, se me acercó una señora vestida con bata y, con un trato muy poco delicado, empezó a aleccionarme sobre la lactancia, introduciéndose en la recién estrenada intimidad madre-hija, sin que le hubiese pedido su ayuda. Me dijo que lo estaba haciendo muy mal y me hundió de consejos para ser una madre aceptable. «Muchas gracias», le dije, esperando que nos dejara a solas.
Educación diferenciada: ¿una fórmula eficaz para luchar contra la brecha de género?
Los partidarios de la educación diferenciada , que ofrecen alrededor de 170 colegios en España, defienden esta fórmula educativa como una elección eficaz para huir de estereotipos de género y potenciar las cualidades y capacidades de cada persona, independientemente...