El término acuñado por el psicólogo británico, Andrew G. Marshall, describe a aquellas parejas sin grandes problemas, que se preocupan tanto de cuidar las apariencias que, al final, se convencen de que todo va bien. Ignoran las señales de alerta y deciden enterrar las dificultades en lugar de solucionarlas.
Javier Royo, psicólogo: “Ante una situación de policonsumo de sustancias en adolescentes los padres tienden a la incredulidad»
Los casos de ansiedad, depresión y trastornos de conducta alimentaria en la población juvenil han aumentado tras la pandemia, junto al consumo de sustancias tóxicas. Las familias pueden percibir que el menor tiene un problema porque empieza a expresar irritabilidad o...