La autora aconseja preguntar a un familiar, a un amigo o a un tutor cuáles son los puntos débiles como padre o madre, y después querer escuchar lo que nos dicen para descubrir algo nuevo y ser mejores.
La vida humana se ha prolongado para ayudar a los demás
"En los abuelos, los nietos encuentran el amor, la protección, la generosidad y la devoción que los padres dedicamos a los hijos, pero con una serenidad y una entereza que, en pleno fragor de vivir y bregar, no siempre tenemos los padres".