Los derechos de los niños y los adolescentes. Esa es la preocupación que desvela a Maite Aurre, logopeda y orientadora pedagógica, de cara a este 2015 que se avecina. Maite es testigo de los estragos morales e incluso físicos (“hay niños que enferman”, asegura…) que un divorcio conflictivo desencadena en un menor, que acaba por sentirse culpable de una situación que vive en carne propia cuando ellos son una responsabilidad adquirida y no un bien de la familia, como tantas veces se cree.
Alertan sobre el peligro de la ortorexia, la obsesión por comer sano
«En ocasiones esta obsesión comienza con una dieta que se plantea para abordar algún tipo de patología que requiera un determinado manejo nutricional y otras simplemente por el deseo de llevar una dieta más saludable», asegura.