Está claro que hay distintos niveles de errores que se le pueden permitir a un hijo o una hija, pero hay que permitirles que se equivoquen, que hagan su balance y aprendan de ello. Eso es algo que no podemos hacer por ellos, y no sería bueno privarles de tal experiencia. Ahora bien, es fundamental que asuman la responsabilidad de las equivocaciones, que vean todas las consecuencias de la decisión que han tomado y que han ejecutado, si no es así, si les suavizamos el “golpe” o les amortiguamos la caída, entonces, no sirve de nada.
Todas las claves para acertar en la elección de un colegio para tu hijo
En breve, las comunidades autónomas abrirán el plazo de inscripción de nuevos alumnos en colegios e institutos para el curso 2013-2014.Muchos niños entrarán por primera vez en el sistema educativo a sus tres o seis años, otros pasarán al instituto y algunos cambiarán...