Mientras que cuando trabajas para otros es más fácil salir por la puerta y olvidarte de la empresa, cuando una persona emprende, aparte del riesgo profesional y económico, hay ocasiones en que se trabaja 24 horas al día, se diluye la diferencia entre casa y trabajo, o se tienen reuniones durante el fin de semana. Todo esto afecta en una doble dirección: puede perjudicar la vida personal, familiar y social, y al mismo tiempo, puede suponer un problema para el rendimiento profesional.
La adolescencia y su desarrollo psicosocial: cómo los adolescentes establecen su identidad
La adolescencia es el periodo en el desarrollo que transforma a los niños en adultos. Durante esta etapa, se suceden cambios en todas las áreas. Ya hemos tratado antes del desarrollo físico y cognitivo y en este artículo completaré el proceso explicando el desarrollo...