Mientras que cuando trabajas para otros es más fácil salir por la puerta y olvidarte de la empresa, cuando una persona emprende, aparte del riesgo profesional y económico, hay ocasiones en que se trabaja 24 horas al día, se diluye la diferencia entre casa y trabajo, o se tienen reuniones durante el fin de semana. Todo esto afecta en una doble dirección: puede perjudicar la vida personal, familiar y social, y al mismo tiempo, puede suponer un problema para el rendimiento profesional.
La importancia de fiarse de los pobres
Cerca de un millón de familias con residencia legal en España, la mitad de ellas con niños, tendrán acceso a esta prestación que busca erradicar la pobreza extrema. Es un problema que ya existía antes de la crisis del coronavirus, pero ahora ya no hace falta buscarlo...