La cuestión de la demografía constituye uno de los problemas fundamentales de la sociedad española. Y decimos esto porque el problema del envejecimiento de las poblaciones aparejado al hecho de la escasa natalidad, trae consigo no solo la puesta en marcha de una enorme labor de ingeniería social sino una dependencia irrenunciable de la inmigración para garantizar la sostenibilidad de un país.
La natalidad, una cuestión de Estado
"En un país donde solo están emancipadas el 18,5% de las personas entre de 16 y 29 años, donde alquilar un piso en solitario implica para la gente joven dedicar el 94% del salario neto, donde la edad media para tener hijo supera los 30 (lo que los expertos llaman...