Llega junio, y con él empieza un período (largo, muy largo) en el que muchas familias se encuentran con un grave problema para conciliar la vida laboral con los horarios escolares, pues con la llegada de junio aparece la jornada continuada y se acaba el comedor escolar en la mayoría de los colegios. Largo, muy largo es este tiempo, tanto para las familias que aún tienen la suerte de tener trabajo, como para las que el comedor escolar es la única posibilidad de ofrecer a sus hijos una comida al día.
¿Qué les queda a los jóvenes?
Las últimas estadísticas sobre el desempleo han ocupado, lamentablemente, el centro mediático tanto a nivel nacional como internacional, adquiriendo un triste protagonismo el caso de los jóvenes (según datos de la EPA, el 91% del empleo destruido en los últimos 4 años...