Llega junio, y con él empieza un período (largo, muy largo) en el que muchas familias se encuentran con un grave problema para conciliar la vida laboral con los horarios escolares, pues con la llegada de junio aparece la jornada continuada y se acaba el comedor escolar en la mayoría de los colegios. Largo, muy largo es este tiempo, tanto para las familias que aún tienen la suerte de tener trabajo, como para las que el comedor escolar es la única posibilidad de ofrecer a sus hijos una comida al día.
¿Tu hijo es un cretino? Dale un libro y quítale el móvil hasta los 16 años
Las generaciones que al nacer ya vieron como sus padres subían y bajaban con el dedo o cómo en el salón las pantallas ya no eran para ver en familia sino individuales son ahora casi adultos y, según el neurólogo y director de investigación del Instituto Nacional de la...