Llega junio, y con él empieza un período (largo, muy largo) en el que muchas familias se encuentran con un grave problema para conciliar la vida laboral con los horarios escolares, pues con la llegada de junio aparece la jornada continuada y se acaba el comedor escolar en la mayoría de los colegios. Largo, muy largo es este tiempo, tanto para las familias que aún tienen la suerte de tener trabajo, como para las que el comedor escolar es la única posibilidad de ofrecer a sus hijos una comida al día.
El consuelo de la Quiet Ambition
"A partir de 2008, la relación entre sacrificio y expectativas se truncó. El sacrificio se hacía mayor en los sectores azotados por la recesión, y la recompensa, más improbable. Las empresas exigían más por mucho menos. Ser becario dejó de ser una gatera de entrada a...