En Arousa, no es que los abuelos se hayan vuelto de repente más glotones. Sí, el volumen de su cesta de la compra supera con creces la media en España, pero lo que a los mayores les pesan no son los kilos, son las cargas familiares. Hay mayores que, después de haber trabajado toda su vida, no pueden ni morirse tranquilos ante la incertidumbre de cómo dejan a los suyos.
Un francés, en huelga de hambre para ver a sus hijos: los ‘secuestros’ crónicos de Japón
La Ley de Familia de Japón (de 1947) no permite la patria potestad común ni recoge ningún tipo de derechos de visitas para los hijos después del divorcio, explica el profesor asociado de derecho de familia de la universidad tokiota de Soka, Toshimasa Miyake, a El...