La soledad nunca es buena compañera, aún más en estas fechas y sobre todo para las personas mayores que solos y, muchas veces acompañados, pierden la ilusión con los años, la chispa que solo prende con el espíritu de la Navidad. “Después de los adolescentes, las personas mayores de 75 años son las que tienen una tasa de suicidio más elevada. Y la soledad la llevan peor los hombres”, señala Paulino Castells, profesor titular de Psicología de la Universidad Abat Oliba Ceu y autor del libro ‘Queridos abuelos’ (Booket).
¿Vivimos en una sociedad que promueve las enfermedades mentales o es que somos más conscientes de ellas?
La salud mental está en el centro de la tormenta. La pregunta no es si somos conscientes, sino si seremos capaces de transformar esa consciencia en acción. ¿Podremos construir una sociedad que deje de alimentarse del sufrimiento y, en su lugar, cultive el cuidado, la...