Parece que es un tipo de “lavado de cerebro” que realiza un progenitor con el objetivo de que el hijo desarrolle sentimientos de rechazo y odio hacia el otro. En la mayoría de ocasiones se trata de madres con trastornos emocionales que desarrollan una obsesión y paranoia hacia el que fue su marido, a veces estas madres llegan a idear e incluso casi creerse situaciones extremas como que el padre pudiera llegar a abusar de los hijos.
La soledad daña nuestra salud
Durante dos años, la ciudad de Nueva York, donde un millón de personas viven solas, fue un experimento sobre la soledad: nueve millones de personas aisladas con celulares y servicios de entrega a domicilio las 24 horas, apartadas de los lugares donde solían reunirse.