Con el despertar de la intimidad, entramos en la pre-adolescencia y la adolescencia, un periodo en que el joven tiene que volver a tomar, como suyas, cosas que ha realizado por imitación o por simple exigencia externa. Ahora se compromete consigo mismo y todo lo que hace adquiere una nueva dimensión.
Julio de la Iglesia, experto en gestión del miedo: “La sobreprotección es el intento de evitar que los hijos sufran, pero impide que crezcan”
En sus encuentros con jóvenes de entre 14 y 22 años lanza un mensaje que cala: “Todos tenemos algo especial. Un talento, una fortaleza, un valor que no depende de las notas, ni de las opiniones de otros, ni de los likes”.