Los casos de hijos que agreden a sus padres son cada vez más frecuentes, aunque no todas las familias se atreven a dar el paso de denunciar. Psicólogos gallegos atribuyen estas actitudes a que los padres actuales tienen una excesiva permisividad y sobreprotección hacia sus hijos. “Hay que poner límites y normas desde pequeños”, sostiene la psicóloga Ana Ulloa. Eso sí, la familia no es la única responsable. En una sociedad donde es fácil observar violencia cada día, los niños “pueden volverse insensibles a ciertas conductas”.
¿Qué quieres ser de mayor?
Una de las mayores preocupaciones de los padres es el futuro profesional de sus hijos. Las nuevas generaciones cada vez están mejor preparadas y tienen más formación que las anteriores. El mundo es cada vez más competitivo y los padres son conscientes de la...