“¡Estoy de vacaciones!”. Ésta es una de las frases más pronunciadas por los pequeños cuando sus padres les dicen que ya es hora de irse a la cama. Con esta queja, los niños reclaman más diversión y menos dormir. No quieren acostarse, desearían estar despiertos las 24 horas del día. Muchos padres se preguntan por qué duermen menos sus hijos en verano y se desesperan porque no consiguen que concilien el sueño. Meterles en la cama en vacaciones se convierte en una batalla campal en algunas familias.
Ser Felices por fascículos
Hay estudios que indican que durante la infancia lo más relevante es el afecto de la familia, mientras que durante la adolescencia lo son las relaciones con amigos, el éxito académico o deportivo o el desarrollo de la propia identidad. En esta línea, durante la...