La mayor parte de las personas que cuidan a familiares enfermos de manera continuada sufren un importante desgaste emocional. Manifiestan que se sienten nerviosas, muy tensas, en alerta y preocupadas durante la mayor parte del día. Perciben que no tienen vida propia, que poco a poco van abandonando hábitos saludables, no duermen bien, no tienen ocio, no se cuidan físicamente. Salen con menos frecuencia con las amistades, no se sienten valorados ni comprendidos ni apoyados por el resto de la familia y van desarrollando un sentimiento de soledad y de tristeza intensos.
La contaminación del tráfico afecta a la función cerebral de las personas
Los hallazgos, publicados en la revista científica Environmental Health, han mostrado que solo dos horas de exposición a los gases de escape del diésel provocan una disminución de la conectividad funcional del cerebro, es decir, afecta a cómo las diferentes áreas del...