Un pequeño huracán está barriendo la estampa social española con suficiente fuerza como para que los ciudadanos estén alerta con estos aires que nos cercan cada vez más, ahogándonos en la impotencia. Hay situaciones institucionales, políticas, económicas, sociales y de todo tipo que, por vergonzosas, tal vez como campañas destructivas, van dirigidas a colectivos políticos de todo signo dejándonos mudos, sin pensar en las consecuencias que, dichas vergüenzas, puedan acarrear.
No creo en las cuotas de paridad de mujeres, sino en la meritocracia
La profesora Chinchilla habla siete idiomas y trabaja como asesora para empresas y organismos gubernamentales. La dirección de las empresas impacta directamente en las vidas de centenares de trabajadores, reflexiona. Por eso, esta ponente habitual en universidades...